María Elvira, ¿espía o trepadora?

Por: Cheo Breñas

María Elvira, ¿espía o trepadora?

Hace poco se suscitó una controversia donde alguien acusó a la señora María Elvira de ser una Agente de la Seguridad Cubana. A mí en lo personal no me pareció una alusión descabellada, dada la forma en que ella maneja su programa y la manera en que nos hace llegar sus comentarios, enfrascada deliberadamente en el modo en que viven los dirigentes de la nación y sobre todo su máxima figura, Fidel Castro.

Desde que veo su programa siempre me ha parecido muy falsa y el enfoque que hace de sus espacios también. Irradia en ella la intención de desacreditar al sistema, pero a la larga lo favorece con sus comentarios y exposiciones.

El hecho es que en todas sus apariciones no hace más que destacar la forma en que viven los dirigentes del gobierno y sobre todo la de Fidel. Por lo que representa y de acuerdo a las personas que suele invitar, (empezando por la ex-nuera del gobernante a la que dedicó más de 2 semanas de entrevistas, para destacar únicamente la miserable vida que según ella vive el comandante), yo pienso… que al parecer el mundo ha estado equivocado durante todo este tiempo señalando al dictador de ladrón y embustero, al nombrarlo uno de los hombres más ricos del mundo, cuando se dio a conocer el monto de sus cuentas en los bancos más importantes del hemisferio; destacando que el señor vive según esta niña… privándose de todos esos bienestares que da el dinero y el poder, para vivir tan austeramente como nos lo presentan en las fotografías.

No es lógico para mí que después de tanta lucha me vengan con este desacierto. Los que hemos tenido el valor de enfrentarnos al gobierno sabemos que todo eso es mentira, que este pintoresco paisaje que nos tratan de mostrar por medio de este programa, no es otra cosa que una artimaña manipulada para limpiar el nombre de quien ha ultrajado y despedazado nuestra patria.

Yo no sé si esta señora será una espía o una trepadora, pero su periodismo barato ha puesto en riesgo nuestra lucha y es momento de detenerla. Si yo fuera un extranjero, o un cubano apolítico nacido en el exterior, ya estaría comenzando a amar a Fidel Castro…

“Cómo es posible que haya gente que pueda odiar a un hombre tan maternal y tan tierno, tan pasivo y elocuente, tan lleno de bondad y riqueza espiritual, que se quita lo que tiene para darlo a su pueblo, que no permite el desafuero y que se obliga a sí mismo y a los que lo siguen a vivir sin la más mínima pretensión.”

¡¡¡ YO QUIERO UN PRESIDENTE COMO ESE !!!

Los cubanos, desde la colonia, hemos soñado con una patria propia y libre de la intervención extranjera. Hemos luchado a brazo partido tiñendo con nuestra sangre cada pedazo de nuestro suelo; no nos hemos detenido nunca ante las adversidades y caminamos siempre de frente al sol en pos de ese propósito. Al menos yo, he soñado con un presidente que no me mire sobre su hombro, que me estreche su mano cual amigo y que me demuestre con su ejemplo que puedo confiar en él. Que viva en una casa como la mía y que equilibre mis necesidades con las suyas, que sea parte del pueblo y que trabaje con nosotros sus proyectos e iniciativas. Que escuche y de su lugar a la oposición y que no interfiera nunca en los derechos civiles de su gente. Que no permita jamás la intromisión de otros gobernantes pero que tampoco él lo haga en otras naciones.

¡¡¡ YO QUIERO PARA CUBA UN PRESIDENTE ASÍ ¡!! Y ese presidente no es ni remotamente Fidel Castro.